2021 comenzó con un manto de nieve que se mantuvo en Laguardia durante las primeras semanas de enero.
Sabemos que la pluviometría puede variar año a año, pero generalmente es difícil encontrar una diferencia de más del 20% respecto a la media anual, aunque varíe mucho la repartición entre los meses del año. Este año han sido enero, junio y noviembre-diciembre los meses más húmedos.
El clima de cada estación ha estado bien marcado; calor en mayo, julio muy estival y lluvias al final del verano, permitiendo una maduración por nutrición y no por concentración.
Las lluvias de junio, sobre la flor, dejaron cierto corrimiento, dando uvas bien ventiladas y carga idónea para obtener buena calidad. El resultado final ha sido una añada de excelente calidad, con equilibrio entre fruta expresiva, elegancia de los taninos y profundidad de los vinos.